Influencia de la Temperatura en la Larvicultura del Pejerrey Marino Odontesthes argentinensis
Autor: Wik Maik Santos Barros (Currículo Lattes)
Director: Dr Luís André Nassr de Sampaio
Resumen
La temperatura es uno de los parámetros de calidad del agua más importantes en la acuicultura, ya que afecta directamente el metabolismo, el comportamiento y los procesos fisiológicos de los animales, y en consecuencia, su bienestar, crecimiento e incluso supervivencia. El pejerrey marino Odontesthes argentinensis es una especie con potencial para la actividad acuícola; sin embargo, la información sobre la temperatura óptima para su cultivo en las fases iniciales de vida aún es escasa. Así, el objetivo del presente estudio fue evaluar el efecto de la temperatura sobre el desempeño zootécnico, los parámetros de estrés oxidativo y la incidencia de deformidades esqueléticas durante la larvicultura de O. argentinensis. Se distribuyeron larvas recién eclosionadas en 15 unidades experimentales (200 larvas/unidad) de 5 L, y se mantuvieron a diferentes temperaturas: 17, 20, 23, 26 y 29 °C, en triplicado, durante 11 días. Las larvas presentaron valores crecientes de peso (P) y longitud total (LT) a medida que aumentaba la temperatura en el rango de 17 a 26 °C. Sin embargo, a 29 °C se observó un compromiso en el crecimiento, con valores de P estadísticamente similares a los del tratamiento de 20 °C. La LT fue estadísticamente similar a la de las larvas mantenidas a 17 y 20 °C. La supervivencia no fue significativamente afectada por la temperatura. El consumo de artemia por parte de las larvas mostró una relación lineal positiva con la temperatura. Los peces mantenidos a 20, 23 y 26 °C presentaron una mejor eficiencia alimentaria que aquellos a 17 y 29 °C. La capacidad antioxidante total frente a radicales peroxilo (ACAP) fue menor en los peces mantenidos a 29 °C, mientras que los mantenidos a 17 °C presentaron mayor ACAP, ambos difiriendo significativamente de los demás tratamientos. No se encontraron diferencias significativas entre tratamientos para los niveles de tiól no proteico (NP-SH). El contenido de tiól proteico (P-SH) fue significativamente mayor a 23 °C que a 17 y 20 °C. Los niveles de peroxidación lipídica (LPO), cuantificados por sustancias reactivas al ácido tiobarbitúrico (TBARS), fueron mayores en las larvas a 17 °C en comparación con 26 y 29 °C. La temperatura de 29 °C indujo la aparición de deformidades esqueléticas (escoliosis, lordosis y cifosis) en el 89,9% de las larvas. En conclusión, 26 °C es la temperatura ideal para la larvicultura de O. argentinensis, ya que garantiza el mejor desempeño de crecimiento, el mantenimiento del equilibrio oxidativo y el desarrollo normal de las larvas.